Tanto en hogares como empresas, seguir un protocolo de emergencias es necesario para que tengas claro cómo actuar en caso de incendio, terremoto u otro tipo de accidente. A continuación, te daremos todas las claves que necesitas saber para estar tranquilo y no poner en riesgo tu seguridad.
Descubre qué normativa seguir si ves una salida de emergencia, a qué número llamar para pedir ayuda o qué cosas no deberías hacer si quieres salir ileso de cualquier situación de peligro.
Protocolo de emergencias: todo lo que necesitas saber
La mejor manera de afrontar una situación de emergencia o de peligro es estar previamente preparado, con un plan que todo el mundo debería conocer y ser capaz de seguir.
De ahí que sea tan importante tener a mano un protocolo de seguridad bien elaborado, explicado y comunicado, ya sea en un vecindario o en un edificio de oficinas. Además, esto no sólo supondrá una gran ayuda en el momento de la emergencia, sino que será muy útil para facilitar la recuperación de la vivienda o la empresa tras el desastre.
Cómo crear un buen protocolo de respuesta para emergencias
Un protocolo de respuesta debe ser elaborado a partir de factores generales y específicos de las circunstancias de la emergencia. Al igual que no será el mismo protocolo el que se use ante un incendio que ante un robo en casa, no lo será tampoco en un apartamento que en el edificio o planta de una empresa.
Un buen protocolo de emergencia será creado teniendo en cuenta cada tipo de emergencia, el entorno en el que se de y más factores como las personas que pueden ser afectadas. También deberá incluir una evaluación previa de riesgos y planificación para asegurar la efectividad del protocolo.

Además, todo buen protocolo debe pasar por entrenamientos y simulacros con los posibles afectados por la emergencia. Así te aseguras de que el plan puede seguirse con relativa facilidad y seguridad. Y no puedes olvidar el equipamiento y las herramientas de emergencia necesarias.
Objetivos de un protocolo de emergencia
Para entender cómo llevar a cabo un buen protocolo de emergencia, hay que tener claros los objetivos del plan. El primero es el de enfrentarse a la emergencia cuanto antes y minimizar todo lo posible su impacto. Para poder hacer esto correctamente hay que seguir el resto de objetivos.
Uno de los objetivos es el de implementar, de forma clara, los roles y responsabilidades de cada persona, para que se facilite la coordinación y comunicación durante la emergencia. También se busca la prevención de la escalada de los incidentes y de la posibilidad de que causen más daños.
Otro objetivo importante es poder informar cuanto antes a las autoridades necesarias para que se puedan hacer cargo de la situación. Para esto último pueden ser muy útiles las alarmas para hogar y para negocio. Y el último objetivo es facilitar una recuperación más rápida tras la situación de emergencia.
Tipos de protocolos de emergencia
Como ya hemos explicado, dependiendo de la emergencia, los protocolos deben ser diferentes y enfocados en las circunstancias del momento. Por eso vamos a decirte ante qué situaciones deberías tener un plan de acción concreto y diferenciado del resto.
Aunque haya casos en los que unas instrucciones generales sean suficientes, hay que saber cómo actuar ante un incendio, cerrando ventanas, evitando el humo, evacuando ordenadamente, etc.
También es recomendable tener un plan de acción ante terremotos u otros desastres naturales, dependiendo de la zona en la que estés y sus probabilidades de pasar por cualquiera de estas emergencias.
También es muy recomendable tener un protocolo de emergencias médicas, sobre todo si en la vivienda hay personas de edad avanzada o con un estado de salud delicado. Además, dependerá de si el plan está pensado en una casa, una oficina o una fábrica.
Salidas de emergencia
Un aspecto de vital importancia en toda situación de emergencias son las salidas para la evacuación. Existen puertas de emergencia específicas para cada emergencia como las cortafuegos. Debes saber que existe una normativa sobre las puertas de emergencia que tienes que seguir.
Las salidas de emergencia deben estar formadas por 3 elementos. El primero es la puerta, que debe tener un mecanismo de apertura sencillo (empujando hacia el frente o hacia abajo) y en ningún caso tener cerradura interior. El segundo elemento es el acceso a la salida, que es el camino que lleva hasta la puerta.

El acceso debe estar siempre completamente despejado y bien protegido. Y el último elemento es la descarga de evacuación, es decir, el camino que hay desde la salida hasta el exterior. Puede ser cualquier espacio abierto que se encuentre dentro de las instalaciones, como un parking.
Además, la señalización de las salidas de emergencia debe ser de fondo verde y figuras o letras blancas. También deberán incluir el dibujo que indique “salida de emergencia” junto a la dirección que hay que seguir. Las señales debes estar siempre iluminadas y seguir el camino que lleva a la salida de emergencia.

Controles de acceso
Los controles de acceso en casa o en tu negocio pueden aportar seguridad de cara a intrusos y accesos no autorizados, pero también tienen desventajas en otros aspectos relacionados con la seguridad. De cara a emergencias que requieran de una rápida evacuación pueden ser un problema.
A la hora de evacuar a todos los afectados por la emergencia, el sistema debe liberarse, evitando entorpecer la salida de la gente. Aunque hay que añadir que de cara a un recuento puede ser útil tener un registro de entradas y salidas.
En negocios de poco personal el control de acceso de la oficina puede ser útil para saber si queda alguien dentro del edificio sin haber interrumpido la salida del resto, pero en edificios con un gran volumen de empleados, el control de acceso solo provocaría atascos y aglomeraciones a la salida.
Teléfonos de emergencia
Tanto para tu hogar como para tu negocio, siempre es recomendable tener apuntados teléfonos de emergencia en algún lugar claramente visible y accesible. Existen varias líneas de emergencia gratuitas que, en todo momento, tienen disponibilidad, y conviene saber a quién se llama con cada línea.
También es recomendable saber qué línea es la más adecuada en cada emergencia. El 112 corresponde a emergencias e incluye tanto seguridad ciudadana como medioambiental. El 062 corresponde a la Guardia Civil, están conectados al 112 y atienden todas las emergencias.

El 091 se dirige a la Policía Nacional, y también ofrecen con una app un chat de emergencia para personas con algún tipo de discapacidad auditiva. El 092 se dirige a la Guardia Urbana o Municipal. El 080 es una llamada a los bomberos a nivel local, y el 085 al Consorcio Provincial de Bomberos.
El 016 presta servicio a las víctimas de violencia de género, y también tienen, con el número teléfono 600 000 016, un chat de WhatsApp. 901 222 222 es el número de Cruz Roja Emergencias y el 91 562 04 20 es el teléfono de emergencia de información toxicológica.
Otros consejos de seguridad
Repasando todo lo que hemos visto hasta ahora vamos a darte algunos consejos de seguridad para tu protocolo de emergencia. Es muy importante, tanto tener planes de emergencia específicos, claros y adecuados, como simulacros y entrenamientos que aseguren una correcta evacuación.
Conviene tener un sistema de seguridad con cámaras de vigilancia que asegure una detección temprana de la emergencia si pudiese darse el caso. Las salidas de emergencia deben cumplir la normativa vigente para maximizar su utilidad. Los números de emergencia conviene tenerlos a mano en caso de necesidad.
En términos generales, seguir las recomendaciones habituales, actuar con calma y escuchar las instrucciones son medidas suficientes para ejecutar correctamente el protocolo de emergencia. Y no olvidar que avisar a las autoridades pertinentes para que nadie corra peligro es siempre una obligación.
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