El detector de humo es un elemento cada vez más recurrente para aquellos que buscan seguridad en su vivienda. Gracias a él es posible detectar cualquier riesgo de incendio que haya en casa y actuar rápidamente para evitar que se propague. Con este tipo de alarmas, sin duda estamos mucho más seguros.
Pero ¿qué sucede cuando el detector de humo no funciona? Es posible que directamente deje de emitir señales, lo que nos hace correr el riesgo de no avisar de un incendio. También es probable que emita sonidos, aunque no es peligroso, pero sí bastante molesto. Si tu detector de humo no funciona, te compartimos algunos trucos y soluciones.
Cómo funciona un detector de humo
Antes de conocer los trucos y soluciones posibles para arreglar un detector de humo que no funciona, es necesario conocer el funcionamiento de este, al menos a nivel básico.
Los detectores de humo funcionan habitualmente mediante un sistema óptico. En su interior, albergan un dispositivo que emite un haz de rayos rojos luminosos. En el momento en que el humo visible penetra e interrumpe la luz de uno de esos rayos, el detector salta. Se trata de algo así como un sensor de movimiento, pero más sensible para poder detectar el humo.
Precisando un poco más esta explicación, cabe destacar que el detector tiene además una célula fotoeléctrica, que es precisamente la que recibe la luz de los rayos. El momento de detección es aquel en que la célula deja de recibir la señal de luz debido a que el humo está interrumpiendo la conexión.
Respecto a la energía que mantiene el detector en funcionamiento, al ser dispositivos que se colocan en los techos (debido a que el humo tiende a subir), no pueden ir conectados a la corriente, de modo que suelen incorporar una batería.
Toda esta información es relevante debido a que, si el detector falla, puede ser porque cualquiera de los elementos mencionados no esté funcionando correctamente.
Falsas alarmas del detector: ¿por qué pita?
Es posible que tu detector esté emitiendo pitidos que nada tienen que ver con la detección de humo o la posibilidad de un incendio en casa. Aunque puede tratarse de una falsa alarma debido a alguna partícula, es raro que esto suceda puesto que los detectores están diseñados para no verse afectados por esto.
Habitualmente, las causas que harán sonar el detector son las siguientes:
Batería agotada
Ya comentábamos en el apartado anterior que el detector puede emitir un pitido si la batería se agota o está a punto de hacerlo. Por ello, el primer paso siempre debe ser comprobarla.
Humo de la cocina
Cuidado cuando estés cocinando, puesto que algunas veces se desprende mucho humo (por ejemplo, al cocinar a la plancha o cocer). El extractor de tu cocina debería ser suficiente, pero muchas veces no funciona todo lo bien que cabría esperar. Si ves que cocinas y sale mucho humo, es preferible que desconectes el detector hasta que hayas terminado.
Suciedad o polvo
La suciedad y polvo acumulados si pueden hacer saltar el detector fácilmente. Si este se limpia cada poco, una pequeña mota no lo hará saltar, pero si dejamos que se acumule mucho el polvo, es bastante probable que haga ruido.
Rotura o defecto de fábrica
En última instancia, si descartamos todas las causas anteriores, es probable que, sencillamente, el detector de humo haya llegado al final de su vida útil o esté estropeado.
Trucos y soluciones si mi detector de humo no funciona
Ahora que ya conoces las causas más comunes por las que un detector de humo puede fallar, te damos algunos consejos para solucionarlo tú mismo, paso a paso:
Comprobar la batería
Lo primero que debes comprobar si tu detector de humo no funciona es la batería del dispositivo. Las baterías, como todos saben, tienden a dejar de funcionar con el paso del tiempo. Si son recargables, por supuesto, habrá que extraerás y recargarlas cada cierto tiempo.
En caso de que no los sean, y como prevención, te recomendamos revisarlas un par de veces al año. Cuando esta falla, puede ser que el detector no emita ningún aviso, o bien que comience a emitir un ruido distinto a la alarma de humo. En cualquier caso, recomendamos que el primer paso sea comprobar la batería.
Comprueba los cables interiores
Si la batería está cambiada y confirmas que no es el problema, el siguiente paso es retirar el detector de humo del techo y abrirlo. Por dentro, verás un conjunto de cables conectados entre sí, que permiten su correcto funcionamiento.
A veces, estos cables pueden aflojarse o incluso desconectarse, provocando que el detector de humo deje de funcionar correctamente. Con ayuda de unos pequeños alicates, puedes intentar reforzar de nuevo los cables para que queden tensos y se pueda restaurar la conexión.
A continuación, coloca de nuevo el detector de humo en el techo y comprueba si funciona. Normalmente, tienen un botón que permite accionarlos para probarlos.
Limpia el detector de humo
Otra de las causas habituales de que un detector de humo no funcione, es la limpieza. El polvo y la suciedad se acumulan con el tiempo en su interior, igual que sucede con los aires acondicionados, radiadores y cualquier otro aparato electrónico del hogar.
Si no es la batería, y los cables están bien, te aconsejamos que limpies con mucho cuidado el detector de humo. Para ello, lo mejor es utilizar aire a presión y hacerlo en seco, ya que el agua podría dañarlo de forma permanente. Probablemente, una vez lo limpies se restaure su funcionamiento.
Contrata un servicio de mantenimiento
Si ninguno de los trucos y soluciones anteriores funciona, no sigas salvo que tengas conocimientos técnicos de detectores de humo, ya que podrías estropearlo definitivamente.
En ese caso, nuestro consejo es que te pongas el contacto con un servicio de mantenimiento. Si el detector de humo forma parte de un sistema de seguridad más completo instalado en tu hogar, la empresa que lo instaló cuente seguramente con una garantía y un servicio de mantenimiento.
Normalmente, suelen ofrecer un servicio permanente a cambio de una cuota mensual, que no necesariamente es elevada. Por otra parte, si el detector lo has comprado suelto e instalado tú mismo, lo más probable es que te resulte más rentable sustituir la unidad por una nueva.
Evitar robos y accidentes domésticos es más sencillo de lo que parece. Por eso, en HomeGO te ayudamos a elegir el sistema de alarma más seguro para tu hogar. Si tienes cualquier duda o problema técnico, visita nuestra web o llama al 900 622 550 y estaremos encantados de atenderte.